8 oct 2018

LA ACUÑA



El primer mordisco me pareció demasiado pegajoso, pero su sabor supero esa textura, esos pequeños trozos de maní y miel se encajaban entre mis dientes que me hacía sentir que se me iban a caer las muelas, mi primera acuña la recuerdo que fue de las manos de la señora Carlota, esta señora era como una de esas mujeres que pintaba Botero, siempre tenía una sonrisa a flor de labios, y  olía a azúcar, miel, chancaca, era una mujer muy amable, y dulce como los que ella preparaba, hoy les contaré sobre las acuñas.
Como empecé las acuñas son dulces empalagosos, se parecen a nosotros los piuranos, así como cuando recibimos a un foráneo y nos esmeramos por atenderlos, por llenarlos de alegrías, y siempre cuidando ser respetuosos.
Estoy convencida de que quien come una acuña lo hace más por amor a la miel, -por alimentar esos bichos que alberga en el estómago, como diría mi mamita- lo hacemos por saborear cada pedazo de este manjar.
Quienes más consumen este dulce son los churres amantes de los caramelos, pues una persona adulta la pensamos dos veces antes de llevarse a la boca un dulce tan empalagoso como la acuña puede dejarnos con los dientes encajados en tan empalagoso manjar.
Algo de historia de este dulce piurano, se puede decir que existen varias referencias literarias de los siglos XIX y XX al consumo de este dulce. Por ejemplo, el escritor peruano Enrique López Albújar (Chiclayo 1872-Lima 1966) en una novela ambientada en la época colonial, describe como se consumió clásicamente durante la celebración religiosa del Corpus Christi.
Algo de historia de este dulce piurano, se dice que existen varias referencias literarias de los S.XIX  y XX sobre el consumo de este dulce, ejemplo, el escritos peruano López Albújar describe en una de sus novelas ambientada en la época colonial el consumo de La Acuña durante la celebración religiosa del Corpus Christi. También lo hace el historiador español Esteban Puig, el destaca este magnifico dulce en su trabajo titulado "Breve diccionario Folklórico de Piuranismos".

Ingredientes
·        2 tapas de chancaca
·        1/2 kg de maní tostado
·        2 cucharadas de mantequilla o margarina
·        1 taza de agua
Preparación
La chancaca se mezcla con agua y jugo de limón se pasa por un colador para retirar las impurezas de la chancaca, luego llevarla a fuego lento hasta que se forma un caramelo denso y oscuro, una vez logrado volcar la mezcla sobre una lata enmantequillada y sobre esta esparcir el maní e ir presionando con la ayuda de una cuchara de madera, una vez tibio se procede a cortar barras medianas que serán envueltas en papel despacho o celofán, y así luego ponerlos a la venta.

Es cada vez más difícil encontrar este dulce, ya que hay menos comprometidos con su preparación tradicional utilizando maní local. Esta variedad era muy común hasta hace unos años, pero ha sido reemplazada por manís que a menudo se importan de otros países de América del Sur que no tienen el sabor, ni textura de nuestro maní.


5 oct 2018

BOCADILLO



Un dulce oriundo de la provincia de Ayabaca en la sierra de Piura. Este rico y aditivo dulce me lleva a recordar las fechas importantes de festividad religiosa, donde con  mi Mamita, Madre, y hermanos salíamos de nuestra provincia Talara, para cumplir con la promesa dada, sea en Querecotillo, Paita, o Ayabaca (esta ciudad yo aún no la conozco), primero cumplíamos con el fervor de Fe, luego venía lo que yo como niña esperaba…era ir puesto por puesto donde se veía los dulces bocadillos probando, mi Madre como siempre mi opresora me decía – muchacha de acá no vas a almorzar- a mí en verdad la comida no era mi prioridad lo que si deseaba es terminar de sed por probar y probar este dulce manjar. Ya una vez que veíamos donde comprar este dulce, partíamos de retorno a Talara, felices de haber cumplido con la promesa del Santo que visitábamos y con nuestras provisiones de bocadillos.
Acá les paso a explicar el proceso de este delicioso dulce Piurano:
El proceso empieza con la molienda de la caña de azúcar de donde se logra obtener el Guarapo (el jugo extraído de la caña), ese jugo se hierve hasta que se vuelve una sustancia gelatinosa, al obtener la consistencia requerida se vuelca sobre ella el maní que le ayuda a volverse más compacta, se deja reposar unas horas y se corta en pequeños trozos.
Este dulce puede convertirse en una adicción para las personas que les gusta el maní y no se empalagan fácilmente. Aléjense de él aquellos que tienen la dentadura frágil o los que como mi amiga Consuelo tienen dentaduras postizas, su textura lo hace pegajoso y más de uno puede terminar con la prótesis dental fuera de sitio. A los que no tienen problemas odontológicos los invito a probar uno de los dulces más característicos de mi querido departamento  Piura, provecho y cuide los dientes.

DULCE DE GUAYABA


Recordando lo dulce de mi infancia, este dulce de Guayaba me lleva a Llicuar a la casa de mi tía Carolina, una dulce anciana que siempre tenía su hoguera lista para preparar un rico postre, gran amiga de mi mamita (abuela materna), la recuerdo con su cabello entre cano, su tez tostada por el sol del campo, su alforja al hombro, sus vestidos de colores claros, sus trenzas, su sonrisa amorosa, sus manos callosas por el trabajo en el campo, y lo que más recuerdo los olores de su casa de barro y carrizo, esos olores de sabor intenso, hoy deseo recuperar una receta que en mi Piura se va olvidando, y es el dulce de Guayaba, muy buena para los que sufren de anemia, para quitar el hambre y la sed. 

1 kilo de guayaba
1 kilo de azúcar o panela rayada
1 taza de jugo de naranja natural
 Agua suficiente

Preparación:
Elige muy bien las guayabas.
Luego deberás lavar bien las guayabas y pelar, puedes usar un pelador de papas para eliminarla.
Remover el exceso de semillas con la ayuda de una cuchara, después troza las guayabas.
Coloca las guayabas en una olla con agua hasta cubrirlas por completo, lleva la olla a fuego medio y deja la fruta en el fuego durante 30 minutos. Llegado este momento, retira del fuego y escurre, las guayabas estarán blandas y listas para continuar con la elaboración.
Tritura, con la ayuda de una licuadora o de un prensador  hasta formar una pasta,  reserva la pasta.
Aparte en una olla añade el kilo de azúcar, la taza de jugo de naranja y la guayaba triturada. Revuelve muy bien y lleva a fuego bajo removiendo constantemente hasta que espese. La mezcla debe lucir un poco traslúcida y tener una apariencia homogénea, este proceso demorará alrededor de 2 horas para alcanzar  el punto, el dulce de guayaba ya estará listo.
Deja enfriar  en un recipiente, el dulce de guayaba se habrá compactado, luciendo su típica textura, se podrá cortar en barras, o poner previamente en recipientes, así ya estará listo para ser disfrutado por todos.
¡Buen provecho!